14 de junio de 2021 (America’s Frontline Doctors)
LifeSiteNews
El Dr. Vladimir Zev Zelenko, descubridor del Protocolo Zelenko (COVID HCQ), ha llamado a los mandatos de vacunas infantiles "experimentación humana coercitiva", pidiendo que los responsables de tales políticas sean juzgados por "crímenes contra la humanidad”.
"Según los datos de la CDC, los niños sanos de 18 años o menos tienen una tasa de recuperación del 99,998% de COVID-19 SIN ningún tratamiento", dijo Zelenko a America's Frontline Doctors (AFLDS).
“NO hay necesidad médica de vacunas. Especialmente, una inyección de ARNm experimental y no aprobada que ha demostrado tener muchos efectos secundarios peligrosos ". Continuó diciendo: "Cualquier gobierno o individuo que fuerce u ordene a los niños a recibir esta inyección experimental está en violación directa de la prohibición de la convención de Ginebra contra la experimentación humana coercitiva”.
“Estos son criminales del más alto orden y deben ser llevados ante la justicia por crímenes de lesa humanidad”.
El Dr. Zelenko ha acusado al gobierno del Estado de Israel de utilizar “la coerción contra sus propios ciudadanos para obligarlos a experimentar con humanos”, instando a detener la campaña.
"El gobierno israelí utiliza la coacción contra sus propios ciudadanos para obligarlos a experimentar con humanos", dijo. “Los pasaportes verdes son una herramienta de discriminación y ejercen una cantidad inadmisible de presión psicológica sobre personas inocentes”.
“Se ha ignorado el consentimiento informado y no se considera la necesidad médica. Por lo tanto, las personas jóvenes y sanas y las que ya tienen anticuerpos todavía se ven obligadas a someterse a una intervención médica experimental que no necesitan ”.
Continuó: “Gobierno israelí: deje de disparar misiles microscópicos a los cuerpos de sus ciudadanos inocentes y sin consentimiento."
"Proceda con precaución, detenga la experimentación humana y recopile más datos de seguridad y eficacia ANTES de usar tecnología nueva y no aprobada".
El Dr. Zelenko ha sido incluido en un grupo de médicos nominados al Premio Nobel de la Paz por su papel en el tratamiento de la pandemia de coronavirus.
Logró prominencia mundial en el tratamiento de pacientes con COVID-19 con hidroxicloroquina y zinc, y descubrió que la mortalidad se redujo 8 veces con el uso de esas dos sustancias. Él dice que el tratamiento con hidroxicloroquina y zinc dentro de los primeros 5 días reduce las tasas de muerte en un 85%.
